Hoy nuestra aventura comienza en Rascafría. Los caminos no son complicados y toda la ruta comprende un terreno plano y sin cuestas, fácil para caminar junto a los niños , sin ningún peligro.

Para llegar hasta este bosque escondido entre la espesura debes ir hasta el conocido Puente del Perdón. Una opción recomendada es dejar el coche en el pueblo e ir paseando por el camino repleto de árboles que sigue el curso del río hasta el puente. Otra opción, es acercarse al puente con el coche y aparcar en algunos espacios más cercanos a este. El aparcamiento en estas zonas suele ser más complicado, pero hay pequeños aparcamientos donde está permitido dejar el coche de forma gratuita.

Pegado a la carretera encontrarás el Monasterio de Santa María del Paular, una gran construcción arquitectónica que perteneció a la orden cartuja desde 1390 hasta 1954 y que después perteneció a los benedictinos. Su conservación actual se estableció gracias a Alfonso XII que lo declaró Monumento Nacional para evitar su desatención.

El camino hacia el bosque

Cruzando el Puente del Perdón se percibe una pequeña salida a la izquierda que lleva a Los Batanes, el camino que debes seguir para ir hacia el bosque finlandés. Este sendero dejará el río a un costado y mostrará una zona más profunda del bosque con árboles a los dos lados del camino. Si realizas esta ruta en otoño, el paisaje que aparecerá a tu alrededor, con sus hojas caídas y llenas de colores, se tornará mágico. Hay incluso momentos que los grandes árboles apenas te dejan ver pequeños trozos de cielo y te sentirás inmerso en una auténtica naturaleza salvaje. 

Descubre qué ver en el bosque finlandés

Debes seguir el sendero hasta distinguir la entrada del bosque finlandés. Sabrás que has llegado a tu destino cuando veas dos bloques de piedra colocados a la izquierda del camino, estos marcan la entrada. ¡Bienvenido al bosque finlandés! Nada más cruzar los dos bloques podrás ver un precioso lago al fondo, una cabaña, y un muelle de madera junto a las aguas. La cabaña de madera junto al lago guarda una belleza propia de los cuentos y fábulas. Es un lugar ideal para observar la flora y escuchar los sonidos que nos ofrece la naturaleza. En el frondoso bosque conviven álamos, abetos y abedules convirtiendo el lugar en un espacio de cuento que te trasladará a las tierras nórdicas.

Adentrándote en el bosque finlandés y cruzando un pequeño puente de madera, podrás descubrir algunas cabañas construidas con grandes palos de leña. El lago y sus juncos ofrecen un paisaje hermoso que deja con la boca abierta a todos los visitantes. Sin duda, un lugar con encanto y muy recomendable para pasear y visitar si no quieres irte muy lejos de Madrid.