Este bar, ubicado en el mismísimo centro de Madrid, te sorprenderá en todos los sentidos. Y es que prepara sus tapas con mucho arte y cariño, y además son bastante generosas teniendo en cuenta su precio. No te vamos a negar que a más de uno querrás sacarle una foto, porque dan más ganas de observarlas y admirarlas que de comerlas, casi igual que su decoración interior.
Pero si decides disfrutarlas en el exterior, disponen de una amplia terraza decorada con plantas y luces que te permitirán vivir una grata experiencia, ya que de noche parecerá que estás bajo el cielo estrellado. Si decides disfrutar de sus tapas no olvides probar sus cervezas, no solo tienen de la tierra sino también internacionales.